Hola amigos de substack, llevo varios días pensando que cuando Dillom escribió “Pelotuda” estaba pensando en criptomonedas. Porque no se me ocurre plata más pelotuda que las criptomonedas. Una que empezaba tranqui.
Ah, si. Hoy vamos a hablar de cripto.
Les voy a dar un momento para aceptar esta realidad.
Vamos, dejen salir del sistema: “Ay no Bel, no me gusta cripto, eso es un re scam, no entres en esa”. Ay, puedo escucharlos en mi cabeza. Tarde chicos. Llegaron siete años tarde para salvarme. Yo me metí en cripto en 2017 por culpa de unos gatos y al día de hoy trabajo en el ecosistema, aunque raramente lo mencione. Listo, salimos del closet. Ahora a lo que nos compete.
No solo estoy metida en cripto, creo en la tecnología y en su poder utilitario, pero a diferencia de mis criptocolegas a mi no me importa si ustedes creen en cripto o si piensan que es un scam. No me interesa convencerlos de nada.
Lo que si me interesa es analizar cosas que pasan en tecnología, y hoy voy a hablar de eso. Y no les puedo prometer ganancias pero si una buena historia, así que vengan que les cuento:
En las últimas semanas y después de dos largos años en baja, bitcoin y ethereum, las dos criptomonedas más populares, empezaron a recuperar su precio en mercado. Cada vez que el mercado retoma valor aparece un entourage digno de circo: vendedores de humo, pseudo-influencers de nicho y gente desprevenida que quiere plata fácil.
En estas primeras semanas de subida apareció una moneda de la que se habla mucho en los espacios web3: un gran lagarto overo llamado Magaiba. Ojo, aclaro, esto no es promoción, tampoco es consejo financiero. Es un recuento de este fenómeno con algunas conclusiones personales.
¿Qué es Magaiba?
Magaiba es una monedita, un token. Los tokens son moneda corriente (ja) dentro del mundo cripto, y pueden tener diferentes usos y utilidades. Existen tokens que se utilizan especificamente como métodos de pago, otros que permiten acceso a determinadas plataformas y contenidos. Existen tokens que los proyectos usan para sus sistemas de gobernanza y permiten participar en votaciones y discusiones. Y también existen tokens que no sirven para nada.
Magaiba es uno de estos. No tiene un caso de uso real, es lo que comunmente se describe como memecoin, una moneda que nace por un chiste o meme en una comunidad. Un ejemplo digital de “era una jodita y quedó”.
Las memecoins no son algo nuevo, uno de los ejemplos más conocidos es $DOGE, una moneda que empezó como meme y terminó con su precio en la estratósfera gracias a un enemigo regular de este newsletter: Elon Musk (prometo que esta es la única mención a su persona que voy a hacer en esta edición, no dejen de leer).
$MAGAIBA también es una memecoin, originada por la comunidad argentina del podcast Círculo Vicioso. Empezó como una broma interna (realmente no hay nada serio sobre este proyecto) pero a pesar de su naturaleza humorística, ganó popularidad rápidamente en redes sociales y entre inversores.
Cuando algo se vuelve popular en el espacio web3 todos tienen que opinar al respecto, y esto nos llevó a dos posturas: degens y moralistas enfrentados.
¿Qué es un degen? La palabra "degen" es una abreviatura de "degenerado", y en este contexto, no necesariamente se refiere a un comportamiento moralmente degradado, sino más bien a un estilo de toma de decisiones financiera impulsiva y especulativa. Las personas que se identifican con esta cultura a menudo se involucran en operaciones de trading de alto riesgo, invierten en proyectos muy volátiles o nuevos sin realizar una investigación adecuada. Buscan ganancias rápidas y altas.
Así que de un lado tenemos a estas personas, que en muchos casos decidieron contar publicamente que compraron la moneda y comparten la historia de sus ganancias o perdidas, de alguna manera invitando a otros a hacer lo mismo. Del otro lado tenemos personas, en general “referentes” de la industria, diciendo “No caigan en esa” y “Es una apuesta, no pongan dinero que no están dispuestos a perder”.
Obviamente empezaron pelear porque de un lado dicen que ellos se están divirtiendo y que no obligan a nadie a comprar. Del otro lado retrucan que generar FOMO mostrando ganancias es igual de malo que promocionar abiertamente. Otras voces agregan que esto es malo para la adopción porque las personas que se inician en cripto en este momento, si su primera interacción es especulativa y de pérdida, se van quemados y con una imagen negativa del espacio.
¿Quién tiene razón? ¿Quién se equivoca? Tengo mucho para decir al respecto.
Mi posición en este tema se puede definir con una analogía al tránsito. Las autopistas en Argentina tienen en sus accesos carteles que indican la prohibición de circular en bicicleta. Si bien el cartel es prohibición no evita que un ciclista pueda efectivamente transitar por ahí. Si vos vas en un auto por la autopista y atropellas a un ciclista ¿Sos responsable del accidente?
Sinceramente no importa si sos culpable o no, el garrón te lo comés igual.
Tener influencia en un espacio donde la mayoría de la gente no la tiene es como tener un auto en una calle llena de peatones. Es muy fácil causar un daño irreparable, incluso sin querer. Por eso, y como un gran poder conlleva una gran responsabilidad siempre es importante cuidar lo que uno dice.
Pero ¿Cuál es la linea que separa ser cuidadoso y directamente avalar la pelotudez? Es fina. Finísima. Y suele no estar bien definida, de hecho hasta discutiría que no es posible de definir. Es tentador querer tratar a todos de idiotas y recibir a los nuevos entre suaves algodones, pero en algún momento el pichón tiene que dejar el nido, el niño de country tiene que aprender a cruzar una avenida y el novato cripto tiene que tomar decisiones financieras por si mismo.
Lo que nunca, nunca debería pasar es que circulen en bicicleta por Panamericana. No jodan.
Recomendaciones:
LadoB - Soy fan de
desde Cemento y desde hace un tiempo su newsletter pasó de ser uno de mis consumos favoritos porque trae mucho “dato mata relato” que en estos tiempos es impagable.Círculo vicioso - La comunidad detrás de Magaiba, un podcast… vamos a decir “particular” a falta de una mejor definición
Y finalmente la referencia al título si como yo son viejitos y no la captaron. Si, ese es el pelado de Soul Train.
Eso es todo por esta edición. No se pueden quejar, ya salí de un closet con ustedes, si no se cuidan en unas semanas me tienen admitiendo mi postura política.
¡Disfruten la semana y no se olviden de darme una manito acá abajo.
¿Me ayudás a crecer? ☕️
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¡Nos vemos la semana que viene!
Me gusta que vayan ganando los Moralistas
Siento que inevitablemente me voy a meter en cripto pero estoy tratando de que ya esté todo más maduro (?
Saludos gracias por el newsletter!